Recordando a Daniel Zarabozo

Algo de él

"Alguna vez se comprenderá con claridad cómo el verdadero nacionalismo no estriba en pintarrajear y corromper la espontaneidad de la música del pueblo, sino en basar la inspiración artística en los frutos lozanos, a veces magníficos, de la conciencia popular".

ANTONIO CASO. México, 1943.

"La Orquesta Típica Mexicana, fue un monumento en honor del nacionalismo musical de México".

GERONIMO BAQUEIRO FOSTER.

Historia de la Música en México, 1964.

HISTORIA DE LA ORQUESTA TIPICA

DE LA CIUDAD DE MEXICO



El nacionalismo musical de México tuvo su origen en el desarrollo de una de las tres corrientes musicales que apuntaron en nuestro país desde 1785; esta corriente musical fue la copiosísima producción de "sonecitos" y "jarabitos", la cual era legítimamente popular.

Esta música era cantada y bailada con acompañamiento sencillo o floreado de conjuntos musicales integrados por arpa, violines, bandolones, salterios y guitarrones. Mientras tanto, en los escenarios teatrales se presentaban "sonecitos españoles" y "bailes profesionales" de gusto y sabor europeo, pero todo ello orquestado y ejecutado por músicos y bailarines profesionales.

Cuando por petición popular se obtuvo el consentimiento de las autoridades virreinales para que en el Gran Teatro de la Metrópoli se alternaran "sonecitos españoles" con "sonecitos del país" o "sonecitos de la tierra", el público en general, al escuchar esta música orquestada y ejecutada por músicos profesionales identificados con el estilo, quiso que también fuera bailada. De ahí nacieron los "bailes de la tierra", que iban a representar, en unión de los "sonecitos" y "jarabitos", el sentido de mexicanidad durante los veinticinco años que precedieron al Grito de Independencia.

Este repertorio de "bailes de la tierra" bajó del escenario teatral, se sumó a los "sonecitos" y "jarabitos" que se ejecutaban fuera de él y llegó a todos los conjuntos de arpa, guitarras, guitarrones, violines, salterios y bandolones, que se encargaron de divulgarlo en las plazas, jardines, mercados, vecindades, etc., en donde la música netamente mexicana se necesitaba como elemento de atracción y era recibida y escuchada con gran alegría.

La producción de estos géneros musicales, ejecutados por conjuntos realmente típicos, cubrió todo el siglo XIX y los conjuntos dieron la dotación instrumental básica que, ampliada por las estudiantinas españolas visitantes, culminó en su desarrollo orquestal con la creación de la Orquesta Típica, fundada por Carlos Curti en el mes de agosto de 1884, según aparece en la copia del acta constitutiva publicada en "La Prensa", el lunes 5 de agosto de 1929.

La primera audición de esta Orquesta Típica fue privada y dedicada al General Porfirio Díaz, entonces Presidente de la República, quien tuvo a bien darle a la Orquesta el nombre de Orquesta Típica Mexicana. El concierto se efectuó el 20 de septiembre de 1884 en el Teatro del Conservatorio, y como obra principal se presentó un arreglo de varias melodías enlazadas, al que Carlos Curti, como autor lo intituló "Aires Nacionales Mexicanos" Ese Conjunto de melodías, cuyo origen era netamente popular, impresionó al auditorio por su belleza y lo perfecto de su ejecución.

Habían tenido que pasar cuarenta años desde que el 10 de febrero de 1844, un notable violoncellista alemán, Maximiliano Bohrer -nacido en Manheim en 1785- habiendo sido invitado para inaugurar el Teatro de Santa Anna hizo escuchar por primera vez, como obra de concierto, una Fantasía sobre sonecitos mexicanos y españoles, de la cual era autor y había intitulado "El Carnaval de México". Fue tan impactante la actuación de este gran artista al presentar música popular mexicana arreglada en esa forma, que a partir de ese momento, gran número de artistas extranjeros que visitaron México, trataron de hacer lo mismo, algunos de ellos hasta vistiendo los trajes típicos nacionales. Como ejemplo tenemos al pianista y compositor vienés Enrique Herz, la cantante inglesa Ana Bishop y los bailarines Corby y Viethoff, de la Compañía Coreográfica de Hipólito Montplaisir. Los jóvenes músicos mexicanos de entonces, habrían de aprovechar esta enseñanza.

Después de una serie de conciertos públicos en diferentes lugares de la capital, la Orquesta Típica Mexicana dio un concierto en el Teatro Arbeu, dedicado a las H. Colonias Extranjeras y a los estudiantes de México; esta audición, efectuada el 3 de diciembre de 1884 y en la que se refrendó el éxito del arreglo de Carlos Curti "Aires Nacionales mexicanos" fue de despedida, ya que la Orquesta había sido invitada para actuar en la Exposición Universal de Nueva Orleans, donde provocó gran admiración por su originalidad en todos aspectos. Al clausurarse la exposición recorrió algunas ciudades de los Estados Unidos de Norteamérica y retornó a México por tener que reanudar Carlos Curti -al igual que algunos integrantes de la Orquesta- sus clases en el Conservatorio.

A fines de 1885 se organizó de nuevo la Orquesta Típica Mexicana, pero ya como empresa; salieron el 8 de enero de 1886 a Zacatecas, donde realizaron tres conciertos y siguieron rumbo a los Estados Unidos de Norteamérica, Canadá, otra vez los Estados Unidos y Cuba, regresando a la República Mexicana en el mes de julio de 1887, donde en la ciudad de Puebla la Orquesta se disolvió.

En 1901, Juan Velázquez, buen músico y bajista, que había acompañado a Carlos Curti en su segunda gira con la Orquesta Típica Mexicana, formó un pequeño grupo típico para actuar en una zarzuela que se representaba en el Teatro Principal. Por lo agradable que se escuchaba su grupo, fue invitado para amenizar una fiesta que se ofrecía a D. Manuel Corral, que a la sazón ocupaba los puestos de Vicepresidente de la República y Secretario de Gobernación. Juan Velázquez aumentó el número de elementos de su grupo para convertirlo en Orquesta y su actuación fue sumamente elogiada.

El compositor Miguel Lerdo de Tejada -que probablemente se encontraba como invitado en la fiesta mencionada puesto que gozaba de magníficas relaciones sociales y políticas- en un encuentro fortuito que tuvo con Juan Velázquez, encomió las cualidades de la Orquesta que aquél encabezaba y le brindó su apoyo y representación para la misma, abriéndole las puertas del Restaurante San Carlos para que trabajaran de las 13:00 a las 17:00 horas todos los días. Al poco tiempo, la Orquesta que había formado Juan Velázquez, abandonó a éste, tomándola bajo su dirección Miguel Lerdo de Tejada, quien, con gran inteligencia, dedicación y apoyo gubernamental, marcó el principio de una era gloriosa para la que había de ser, andando el tiempo, la actual Orquesta Típica de la Ciudad de México.

Ya al frente de su Orquesta, Miguel Lerdo de Tejada salió a Buffalo, N.Y., en Julio de 1901 y regresó en octubre del mismo año. En 1904 actuó en la Exposición de St. Louis Missouri. En 1909 acompañó al Gral. Porfirio Díaz a El Paso, Texas, donde el Presidente de México se entrevistó con el Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, W. H. Taft. En 1910, además de actuar con su orquesta en las fiestas del Centenario, organizó una Orquesta Típica de Señoritas para los mismos fines. En 1913 la Orquesta Típica Lerdo de Tejada fue uniformada con el traje de gala de los Rurales y en 1917, debutó en el Salón de Música de Cámara del Carnegie Hall el 2 de marzo, actuando por segunda vez el 4 de abril del mismo año, en función de despedida.

En el mes de septiembre de 1919, salió la Orquesta Típica Lerdo de Tejada a una gira por el norte de la República Mexicana y algunas ciudades estadounidenses, siendo la última Los Angeles, Cal., de donde regresó a México en los primeros meses de 1920. En 1921, Miguel Lerdo de Tejada -quien desde el año anterior había sido nombrado Jefe de la Oficina de Espectáculos y había instituido el Consejo Cultural de la Ciudad de México- fue designado Organizador y Director de la Orquesta Típica del Centenario, que habría de participar en los festejos conmemorativos de la consumación de nuestra Independencia. En 1923, la Orquesta Típica Lerdo de Tejada realizó una gira por varios estados del centro de la República Mexicana.

No obstante que desde su fundación, la Orquesta Típica Mexicana y posteriormente la Orquesta Típica Lerdo de Tejada recibieron todo el apoyo moral y casi todo el económico de parte del Estado, (directamente del Presidente de la República o a través de los altos funcionarios del Gabinete), es hasta 1920 cuando asoman firmes indicios de querer incorporar dicho organismo musical a los servicios oficiales en forma definitiva. Con ese objeto, en el periodo 1920-1924, se creó la Orquesta Típica Presidencial, que fue sucesivamente dirigida por Juan Torreblanca, Miguel Lerdo de Tejada, José Briseño y Alfonso Esparza Oteo. El 31 de diciembre de 1924 desapareció la Orquesta Típica Presidencial.

En 1928, como resultado de una atinada coordinación entre el Dr. Manuel Puig Casaurano (que era Ministro de Educación Pública), Mr. Morrow, Embajador de los Estados Unidos de Norteamérica en México y Miguel Lerdo de Tejada, aprovechando la visita a nuestro país del famoso aviador Charles A. Lindberg, fue posible la organización de una gira de la Orquesta Típica Lerdo de Tejada por los Estados Unidos de Norteamérica y Canadá, contratada por el Circuito de Teatros Americanos Keith Albee Orpheum para actuar en cincuenta teatros pertenecientes al circuito. El debut de la Orquesta fue el 19 de febrero de 1928 en el St. Louis Teathre de la ciudad de St. Louis Missouri y la última actuación en el Keith’s Teathre de Syracusse, N. Y., el 23 de diciembre del mismo año. Terminado el contrato, la Orquesta permaneció en Nueva York realizando grabaciones hasta mediados del mes de enero de 1929, regresando a México inmediatamente. Ya en esta ciudad, sólo permaneció el tiempo necesario para organizar una gira por América del Sur, aunque por diversas razones sólo pudo visitar las repúblicas de Guatemala y San Salvador, retornando a México de inmediato.

En noviembre de 1929, siendo Presidente de la República el Lic. Emilio Portes Gil y el Dr. Manuel Puig Casauranc, Regente de la Ciudad de México, por Decreto Presidencial se creó la Orquesta Típica de la Policía bajo la Dirección de Miguel Lerdo de Tejada. Desde su creación hasta el año de 1932 inclusive, la Orquesta se presentó en la ciudad de México y estados de la República Mexicana cercanos, pero en 1933 y 1934 salió a los Estados Unidos de Norteamérica a dos Convenciones Policiacas que se efectuaron en la ciudad de Chicago, Illinois. También en el año de 1934 acompañó, aunque reducida en la cantidad de sus elementos, al Gral. Lázaro Cárdenas en su campaña presidencial. En 1935 viajó la Orquesta Típica de la Policía a Washington, D. C., y en 1936 a Nueva York, San Diego y Los Angeles.

En 1938, entre el 19 de marzo y el 30 de noviembre, la Orquesta Típica de la Policía viajó a Oakland, Stoponi, San Francisco, Los Angeles, Tucson, Portland y Seattle en los Estados Unidos de Norteamérica y a la República de Guatemala. En octubre de 1939 actuó la Orquesta en la Feria de Dallas y el martes 14 de noviembre del mismo año, salió a Guatemala para actuar en la Exposición Anual que ahí se celebraba.

El 6 de marzo de 1940, la Orquesta emprendió un viaje a la República de Chile y no pudiendo ir Miguel Lerdo de Tejada ni Pablo Marín, que eran Director y Subdirector titulares de la misma, por acuerdo del Presidente de la República, Gral. Lázaro Cárdenas, el Lic. Raúl Castellanos, Regente de la Ciudad en ese entonces, extendió un nombramiento de Subdirector Interino de la Orquesta Típica de la Ciudad de México a Mario Talavera. Esto fue por mediación del Lic. Luciano Kubli, quien estaba al frente de la Dirección General de Acción Cívica y cultivaba sincera amistad con Miguel Lerdo de Tejada y Mario Talavera. Es probablemente en este año de 1940, cuando cambió la denominación de Orquesta Típica dela Policía a Orquesta Típica de la Ciudad de México. El 26 de mayo del mismo año, después de haber obtenido un clamoroso éxito en cada uno de los lugares que pisaron, se encontraron de regreso ya en su patria todos los elementos que integraban la Orquesta Típica de la Ciudad de México.

El compositor Miguel Lerdo de Tejada, Director de la Orquesta Típica que desde 1901 formó Juan Velázquez y que se transformara sucesivamente en Orquesta Típica Lerdo de Tejada, Orquesta Típica de la Policía y por último en Orquesta Típica de la Ciudad de México, murió a las cinco de la tarde el dta 25 de mayo de 1941 a la edad de 72 años. Nombrado por las autoridades del Departamento Central, atendiendo a sus méritos propios, lo sucedió en el puesto el Maestro Pablo Marín, Subdiector titular de la Orquesta desde 1929. Magnífico músico y ferviente enamorado de la música mexicana, enriqueció el repertorio de la Típica con gran número de arreglos y algunas composiciones propias. A su muerte, en 1960, fue nombrado Director Interino el Maestro Jesús Corona, contemporáneo de Miguel Lerdo de Tejada y Subdirector Titular cuando Pablo Marín era Director. Poco tiempo duró en ese puesto. Al ser elegido por el Lic. Ernesto P. Uruchurtu, Regente de la Ciudad, el compositor de fama internacional Ignacio Fernández Esperón (Tata Nacho) pasa a ocupar el puesto titular en ese mismo año y el Maestro Jesús Corona regresó a la Subdirección.

El compositor Ignacio Fernández Esperón creó una nueva plaza de Subdirector para que la ocupara Félix Sanatana, también magnifico músico arreglista, quien hasta su muerte, en 1972, la desempeñó y trabajando intensamente acrecentó el repertorio de la Típica con una serie de arreglos musicales muy bien logrados.

Al morir Tata Nacho en 1968, de nuevo tomó la Dirección de la Orquesta Tí[ica de la Ciudad de México el Maestro Jesús Corona, pero ya con el carácter de Titular, nombramiento que le fue ratificado por las autoridades del Departamento Central, aunque debido a su edad, casi delegó toda la actividad musical en Félix Santana y en un joven músico, el Maestro Jesus Galarza Acosta, que le sucedió en el puesto con el carácter de Director Interino en abril de 1975, fecha en que se jubiló el Maestro Jesús Corona.

En el mes de abril de 1977 interviene por primera vez en la historia de la Orquesta Típica de la Ciudad de México, la Comisión Mixta de Escalafón del Departamento Central y somete a concurso la plaza de Director Titular, participando en él los Subdirectores de la Orquesta, Maestros Delio Solís Alvarado y Daniel Zarabozo Gutiérrez, resultando triunfador por veredicto unánime del Jurado, Daniel Zarabozo Gutiérrez.

Daniel Zarabozo G., Compositor, Arreglista y Director de Orquesta, egresado del Conservatorio Nacional de Música, fue invitado a colaborar con la Orquesta Típica de la Ciudad de México en el año de 1962 con carácter de Arreglista. Entre 1962 y 1977, además de sus actividades independientes, en la Orquesta desempeñó los puestos de Director del Coro, Director Invitado y Subdirector Titular de la misma, además de fungir como Maestro en el Conservatorio Nacional de Música y en la Escuela Superior de Música, donde impartía las Cátedras de Solfeo, Armonía y Apreciación Musical.

Es así que luego del periodo en que la Orquesta tuvo gran apoyo gubernamental y reconocimiento en el extranjero, se le restó importancia por las autoridades hasta que ocupa por concurso la plaza de Director Daniel Zarabozo, quien retoma el espíritu de Miguel Lerdo de Tejada para devolver a la Orquesta su brillo y fama nacional e internacional, pero por políticas gubernamentales y por falta de las relaciones sociales y políticas que disfrutaba Lerdo de Tejada, mucho se avanzó pero no solidifcó todas sus inquietudes, por lo que inmediatamente después de la jubilación de Daniel Zarabozo dicha Orquesta volvió a caer en el olvido y en la asignación política de sus Directores.

Al Maestro Zarabozo le han sucedido en el puesto de Director, hasta la fecha, los Mastros José Antonio Zavala y Armando Zayas.

En los 117 años de existencia de la Orquesta Típica y entre sus muy pocos Directores y Subdirectores, Daniel Zarabozo ha sido uno de los contados integrantes de esa Orquesta que ha tenido conocimientos plenos e interés sobre la música mexicana.

A continuación se relacionan los Directores y Subdirectores (titulares e interinos), con que ha contado La Típica.

CARLOS CURTI

JUAN VELAZQUEZ

MIGUEL LERDO DE TEJADA

JUAN TORREBLANCA

MIGUEL LERDO DE TEJADA

PABLO MARIN

JOSE BRISEÑO

ALFONSO ESPARZA OTEO

MARIO TALAVERA

IGNACIO FERNANDEZ ESPERON (TATA NACHO)

FELIX SANTANA

JESUS CORONA

JESUS GALARZA

DANIEL ZARABOZO

JOSE ANTONIO ZAVALA

ARMANDO ZAYAS

Mayoritariamente este texto fue tomado de "De los Mixcoacallis a la Orquesta Típica" (Selección de Textos, Cronologías y Notas de Fernando Muñoz), México, 1987.

© 1996
Raúl Zarabozo



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© 1994
Raúl Zarabozo E. de R

Música ambiental de esta página:

"Serenata"... Daniel Zarabozo

Arreglos musicales:


Tito Enríquez